Porque podríamos vivir entre tazas

El otro día mirando tazas online (lo sé, la gente mira ropa o móviles, yo miro tazas, asumámoslo y continuemos) encontré un juego realmente bonito y pensé que, a pesar de lo que cuidamos la mesa en Navidad, qué poco cuidamos las tazas. 

Así que mi propósito de este mes es conseguir que nadie acabe sirviendo chocolates caseros en una recopilación de tazas traídas de Benidorm, compradas con el periódico y combinadas con unos tazones con asa de aquella prima que se mudaba. Y para eso os traigo unos ejemplos de esos que son fáciles de dibujar en cualquier modelo de Ikea, se hornea media hora a 170º et voilá! Tienes tazas para toda la familia. Por favor, que nadie siga poniendo excusas, haced realidad mi sueño. Queremos vivir en un mundo con tazas bonitas por doquier. 

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Luna Carmona

Un poco de positividad

Fuente Pinterest

Todos podemos tener un momento de bajón en nuestra vida y justo en esos momentos es cuando tendríamos que recordarnos a nosotros mismos todo lo que valemos. Parece una tontería pero visualizar nuestras metas o nuestros propios sueños hacen que el camino para conseguirlos sea un poquito menos duro y no darnos la vuelta cuando encontremos dificultades. Alguno seguro que ha empezado un régimen y ha puesto una foto en la nevera para acordarse de por qué tiene que hacer el sacrificio de privarse de ciertos alimentos…

Cuando era adolescente tenía sobre mi mesa de estudio el típico corcho donde colgar cosas con chinchetas, y siempre tenía algún mensaje o fotos de cosas que me gustaba recordar a diario. Hoy quiero dejaros algunos mensajes que me parecen positivos y que seguro que a todos nos ayuda recordar en días negativos.

Fuente Pinterest

Fuente mr.wonderful

Fuente Pinterest

Fuente Pinterest

Fuente Pinterest

Fuente Pinterest 

Por último os propongo un juego:

¿Qué os parece dejarle un mensaje positivo a alguien cercano?

Puede ser quien viva con nosotros y dejarle algún pos-it pegado a la leche que beba todas las mañanas y simplemente ponerle “¡que tengas un buen día!” o si queréis ser románticos y no vais a ver a esa persona por la noche pegarle en la almohada un “¡sueña conmigo!”. Pero no tiene por qué ser sólo con la persona que viváis, puede ser algún compañero de trabajo, o amiga y que simplemente queráis dejarle un mensaje positivo.

Es un juego que empezamos a hacer Alex y yo cuando nos fuimos a vivir juntos porque por los horarios de cada uno había días que no coincidíamos en vernos mucho. A mí me alegraba el día llegar a casa y encontrar una nota sorpresa.



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Paula Alonso A.